Un llamado, una tormenta, un desahogo interior...

Nunca creíste que era alguien diferente,

lastimaste con azotes de palabras nunca temiste,
siempre viste aquel chico desamparado de virtudes,
y aquellas malas actitudes a cualquiera hunde.


Me viste, caminando en contramano,
y nunca me diste esa mano que te pedía llorando,

enserio, pedí a dios por mi vieja y mi hermano,
y padecí la perdida de fe en el ser humano.


De vago, mártir, imbécil y sin esperanza,
gritaba a las orejas y mis piernas temblaban,
no podía creer de quien venían esas palabras,

creí y soné muchas veces que me mataba.

Y nunca vi tan de cerca la miseria humana,

alguien tan importante paso a ser a alguien que me odiaba,
mis manos apretaban, golpeaban las paredes,
el alma se desprende al punto de sentir, que nadie me ayudaba...



(ESTRIBILLO X2)


Nunca podrás olvidar esta situación,
nunca tendrás su control,

solo intentaras manejarla,
sostén muy fuerte el timón,
aunque la tormenta este despejada y alejada...



Nadie supo con exactitud todo lo que sufrí,

tengo un pacto con mi almohada que si algún día hablara,
se callara de esto nadie se viese reflejada,
con mi incolora paleta llamada vivir.


El porvenir que retumba las almas ajenas,
tanto caminar pa' delante solo me dio gangrena,

tumbos y caídas me moldearon a su manera,
tantas cosas marco que hoy pido su presencia.


No te diste cuenta todo el daño que causaste,
jugabas a las escondidas, te encontró la muerte,
lastimaste mentes, te fuiste por la puerta de atrás,

enterrado estas y suenas que la tormenta cese.

Hasta el día de hoy te siento en todo rincón,

desde el mas allá viste de lo que soy capaz,
y a pesar de todo ya nada, me parara,
ya no existe rencor, tienes mi perdón, papá...



(ESTRIBILLO X2)


Nunca podrás olvidar esta situación,
nunca tendrás su control,

solo intentaras manejarla,
sostén muy fuerte el timón,
aunque la tormenta este despejada y alejada...