Es hora de buscarle al hijo de mi apa
una mujer bonita, con mucho corazon
que solo con mirarla se me estremezca el pecho

y que al sentir su cuerpo juntito entre mis brazos
para subir al cielo drogados de pasion.


Tal vez yo pida mucho,pero es lo que deceo
para poder amarla como lo manda dios
y demostrarle siempre con hechos y palabra

como se debe amar para subir al cielo drogado de pasión.

La buscare en el frío de cada madrugada

la esperare en la cuna de cada amanecer
se bien que un día vendrá y yo desesperado
le haré saber que es ella el amor que siempre había soñado.